Miedos
15mar

Los miedos, la ansiedad, las dudas y el estrés aparece todos los días y con frecuencia en nuestras vidas en distintas formas de manifestación, además son aspectos que proliferan día a día en nuestra sociedad.

Vivir de esta manera es vivir  sobrecargados, dejando de lado muchas cosas buenas porque ni siquiera somos conscientes de que están ahí a nuestro alcance, sino que  pensamos y hablamos demasiado y reaccionamos de forma exagerada, lo cual afecta al cuerpo y a la mente de forma muy negativa.  Lo peor es que eso si esto se  convierte en una costumbre, que a menudo no se controla, y no ponemos remedio de parar y relajarse estaremos inmersos en un bucle de negatividad y seremos victimas de secuestros emocionales una y otra vez amargando nuestra vida y la de nuestro entorno.

Hay muchas razones para que estos aspectos se desarrollen de forma inesperada en nosotros,  pero las principales incluyen:

• Experiencias pasadas, que conllevan decepción, inseguridad o recelo.
• Falta de fe en uno mismo y en los demás, se nos olvida creer en uno mismo, falta de autoestima, de valorar lo que tenemos.
• La necesidad de aprobación, de pertenecer o de ser aceptado y el miedo al rechazo.
• El hábito de ver las cosas negativamente, diálogos internos tóxicos, pensamientos negativos constantes.

Al ser victimas de estos secuestros emocionales la persona sufre de una parálisis mental e incluso emocional. Se produce un bloqueo o una situación de pánico en la que no hay iniciativa positiva que sea posible. La mente está acosada por preguntas centradas en el “¿por qué?” o “¿qué?” y empezamos a analizar de forma negativa y destructiva el pasado, o a preocuparnos por un futuro que desconocemos y que lo más fácil es que todo lo que imaginemos en esos momentos de él, sea irreal, en realidad, las preguntas, imágenes o explicaciones en nuestro diálogo internos que nos planteamos no son para encontrar respuestas sino para prolongar la vacilación, o para mantenerse uno a la defensiva, o en un estado de no compromiso, de no querer cambiar, de trasladar nuestro estado a los demás,  sin que en realidad eso sea así,  sin querer hacer, ni si quiera saber.

El tipo de preguntas que deberíamos hacernos cuando notemos este tipo de sensación es ¿que gano comportándome así?, ¿que puede pasar si sigo con este pensamiento? ¿que daño estoy creando en mí y en mi entorno?, pero como todo esto ocurre en décimas de segundos ¿cómo puedo pararlo? ¿cómo puedo controlar estas situaciones? ¿cómo puedo superarme a mí mismo?

Antes de participar o de reaccionar, a menudo necesitamos relajarnos, calmarnos y observar para que nuestra contribución sea apropiada y positiva.

Para un segundo, no explotes, y vete, aparta tu mente y tu cuerpo a otro lugar, a otro escenario, y respira, respira hondo, y cuenta, (hacer este ejercicio durante 10 minutos), y posteriormente pregúntate, lo anterior y preguntas del tipo ¿cómo me veo actuando así? ¿cómo me ven los demás? ¿que gano con todo esto? ¿y si en vez de ver el muro me planteo ver un puente? ¿que solución positiva puede encontrar a esta situación?

Como superar el miedo, la angustia, las dudas o la ansiedad SE BASA EN ENTENDER por qué sentimos esas malas sensaciones y esos deseos de echarnos para atrás.  Este tipo de sensaciones lo  único que hace es protegernos de una amenaza pasada o futura pero no es inteligente simplemente actúa por impulsos, y sin embargo más que protegerte no soluciona el problema, lo empeora, porque te bloqueas, te paralizas  y  no avanzas, ¿quieres seguir así o te apuntas a la autosuperación?, vuelve a preguntarte ¿esto me va a vencer a mi?

Algunos consejos para elegir la calma y autosuperarte:

*vive el presente, el ahora, no analices el pasado  y no te preocupes por el futuro, si lo vas hacer que sea de forma positiva, terapéutica.

*haz ejercicios de relajación, meditar, contar.

*sal del escenario que te ha provocado esa sensación y ponte una actividad diferente a realizar.

*huye de las personas tóxicas que acrecientan tu estado.

*analiza que te hace sentirte así y hazte las preguntas de autocoaching anteriormente señaladas.

*querer es poder, costará pero si no empiezas nunca sabrás si puedes.

Deja un comentario

8 − cinco =

Error: Please check your entries!